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Escrito por el Ago 8, 2013 en cocina de cosecha | 2 comentarios| etiquetas: adobos, albahaca, cenas de sofá, pescado, sardinas, tostas, verano

tosta de sardinas marinadas

tosta de sardinas marinadas

{para cuatro personas y un primer plato de verano}
  • docena y media-dos docenas de sardinas limpias en filetes
  • 250 ml de aceite de oliva
  • el zumo de un limón
  • un puñado de hojas de albahaca sanas y frescas
  • 2 yemas
  • 6 filetes de anchoa
  • 1 cucharada de vinagre de jerez (si te gusta mucho el vinagre, dos)

Colocamos los filetes de sardina en una fuente que pueda contener el adobo.

En casa. Sardinas marinadas
Buscad sardinas frescas. Lucirán como éstas: brillantes, tersas, con ojos húmedos y frescos.

En casa. Sardinas marinadas
Preparamos el adobo en la batidora: mezclamos el aceite con el zumo de limón y algo de sal y pimienta. El líquido cambiará de color y de textura, pasando a ser una emulsión. Con ese líquido cubrimos los filetes de sardinas, tapamos la fuente con film y la metemos un día entero en la nevera.

En casa. Sardinas marinadas
En casa. Sardinas marinadas
En casa. Sardinas marinadas
En casa. Sardinas marinadas
Al día siguiente, escurrimos el adobo de los filetes, colocamos los filetes donde queramos llevarlos a la mesa y volvemos el líquido del adobo a la batidora.

Le añadimos las anchoas, las yemas, el vinagre y las hojas de albahaca.

En casa. Sardinas marinadas
Batimos de nuevo. Probamos el punto de sal y ajustamos (cuidado con la sal de las anchoas).

En casa. Sardinas marinadas
Vertemos la salsa de albahaca sobre los filetes, y sacamos el resto en un jarra.
Tostamos unas rebanadas de pan de hogaza y las rociamos con un buen aceite de oliva virgen.
Preparamos una ensalada ligera con lechuga romana cortada fina, unos huevos duros, aceitunas manzanilla y aceitunas negras.
Y listo.

En casa. Sardinas marinadas
Una rebanada de pan, unos buenos filetes de sardina por encima, un chorritón de salsa, unas gotas de aceite de oliva… y a disfrutar pringándose los dedos.
Felices vacaciones!

*fotografías en blanco y negro, José Luis Medina.

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2 Comentarios

  1. Acabo de descubrirla! Dios! que emoción! Otra hermosa descripción de tus vivencias de la infancia, que son vivencias tuyas pero no solo vividas por ti. Tu las sacas a la luz y nos las haces revivir. Que maravilla, llegan los sentimientos nítidos, claros como esa agua que cubre las piernas del abuelito. Gracias Cuqui, esto se había quedado dormido en mi interior. Hoy he vuelto a tener 30 años y he comido esas toñinas hechas por la abuelita. Y…que hermosas fotos. Besos

    • Jolín!! Pues ya es raro que a ti se te pase ni una ni media, ni que sea verano ni ná de ná!!
      30 años es una edad perfecta para tenerla un ratito cada día, ¿no? Así que me siento muy feliz por haberte ayudado a hacer ese pequeño vuelo.
      Y sí, a mí también me encantan esas fotos. Guardo esa toalla azul, blanca y roja como el pequeño tesoro que es, y de vez en cuando, aún la saco de su caja para tocarla y olerla…
      Así yo vuelvo a tener tres años, que también es una edad estupenda para tenerla un ratito cada día, ¿no te parece?
      Abrazo fuerte fuerte. Y feliz vuelta al cole!!

Trackbacks/Pingbacks

  1. un pozalito de tellinas | pan y rosas - […] una de pescaditos relucientes: sardinas en adobo de albahaca sobre una rebanada de pan de hogaza, un plato provenzal…

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